jueves, 29 de septiembre de 2011

“Cuatro Leyes de la Espiritualidad”


1° LEY: La persona que llega es la persona correcta”, es decir que nadie llega a nuestras vidas por casualidad, todas las personas que nos rodean, que interactúan con nosotros, están allí por algo, para hacernos aprender y avanzar en cada situación.

2° LEY: Lo que sucede es la única cosa que podía haber sucedido”.
... ... ... Nada, pero nada, absolutamente nada de lo que nos sucede en nuestras vidas podría haber sido de otra manera. Ni siquiera el detalle más insignificante.
... ... No existe el: “si hubiera hecho tal cosa…hubiera sucedido tal otra…”. No. Lo que pasó fue lo único que pudo haber pasado, y tuvo que haber sido así para que aprendamos esa lección y sigamos adelante.
Todas y cada una de las situaciones que nos suceden en nuestras vidas son perfectas, aunque nuestra mente y nuestro ego se resistan y no quieran aceptarlo.

3° LEY:En cualquier momento que comience es el momento correcto”.
Todo comienza en el momento indicado, ni antes, ni después. Cuando estamos preparados para que algo nuevo empiece en nuestras vidas, es allí cuando comenzará.

4° LEY: Cuando algo termina, termina”.
Simplemente así. Si algo terminó en nuestras vidas, es para nuestra evolución, por lo tanto es mejor dejarlo, seguir adelante y avanzar ya enriquecidos con esa experiencia.
Creo que no es casual que estén leyendo esto, si este texto llegue a nuestras vidas hoy; es porque estamos preparados para entender que ningún copo de nieve cae alguna vez en el lugar equivocado!

Vive Bien, Ama con todo tu Ser y se Inmensamente Feliz!!!!

lunes, 26 de septiembre de 2011

Be happy!

Sé feliz. Muéstrate. Sigue tu instinto. Inspírate. Deja de ser una víctima. Haz todo aquello que sabes hacer bien. Ama tu trabajo. Míralo desde una nueva perspectiva. Ten curiosidad por todo lo que te rodea. No te aisles. Júntate con los que quieres. Márcate objetivos. Acaba lo que empezaste. Ayuda a los demás. Olvídate por un día de las noticias. Baila. Mímate un poco. Enfréntate a tus miedos. Visita un museo. Alguna decisión es mejor que ninguna decisión. Haz ejercicio. Desenchúfate de la tele. Escucha música. Mantente en contacto con la naturaleza. Ánimo, tú puedes. Busca el equilibrio. Procura dormir bien. Lee. Compra flores. Trata de llegar. Programa un plan realista. No te compares con los demás. Vive el momento. No seas injusto contigo mismo. Acepta que la vida tiene momentos buenos y malos. Piensa cada noche en las cosas buenas que te han sucedido hoy. Deja que entren las nuevas ideas. Cree en ti. Sé amable. Deja que la gente sepa lo especial que eres. Sé honesto contigo mismo. No dejes que te obsesionen los pensamientos negativos. Céntrate en crear lo que deseas. Dedica tiempo a simplemente divertirte. Da las gracias a las personas que te enseñan, que te apoyan, que te animan, e invítalas a tomar un café. No lo olvides, el dinero no puede comprar la felicidad. Ofrece lo que ya no necesitas a quienes sí puedan necesitarlo. Valora quien eres en este momento. Forma parte de un grupo. Encuentra un espacio en común. Cuida el amor de tu vida. Haz una lista de agradecimientos. Ama a la madre tierra. Hazlo lo mejor posible. No pierdas la esperanza, nunca sabes lo que el mañana te puede traer. No dejes de aprender. Aprecia lo que tienes. Cree en algo tan grande como tú mismo. Permanece junto a tus amigos y tu familia. Sé honesto contigo mismo.

http://www.youtube.com/watch?v=TxXjH4ctH4g&feature=player_embedded#!

viernes, 23 de septiembre de 2011

"Cuando me amé de verdad"

Cuando me amé de verdad, comprendí que en cualquier circunstancia, yo estaba en el lugar correcto y en el momento preciso. Y, entonces, pude relajarme. Hoy sé que eso tiene nombre… autoestima.

Cuando me amé de verdad, pude percibir que mi angustia y mi sufrimiento emocional, no son sino señales de que voy contra mis propias verdades. Hoy sé que eso es… autenticidad.

Cuando me amé de verdad, dejé de desear que mi vida fuera diferente, y comencé a ver que todo lo que acontece contribuye a mi crecimiento. Hoy sé que eso se llama… madurez.

Cuando me amé de verdad, comencé a comprender por qué es ofensivo tratar de forzar una situación o a una persona, solo para alcanzar aquello que deseo, aún sabiendo que no es el momento o que la persona (tal vez yo mismo) no está preparada. Hoy sé que el nombre de eso es… respeto.

Cuando me amé de verdad, comencé a librarme de todo lo que no fuese saludable: personas y situaciones, todo y cualquier cosa que me empujara hacia abajo. Al principio, mi razón llamó egoísmo a esa actitud. Hoy sé que se llama… amor hacia uno mismo.

Cuando me amé de verdad, dejé de preocuparme por no tener tiempo libre y desistí de hacer grandes planes, abandoné los mega-proyectos de futuro. Hoy hago lo que encuentro correcto, lo que me gusta, cuando quiero y a mi propio ritmo. Hoy sé, que eso es… simplicidad.

Cuando me amé de verdad, desistí de querer tener siempre la razón y, con eso, erré muchas menos veces. Así descubrí la… humildad.

Cuando me amé de verdad, desistí de quedar reviviendo el pasado y de preocuparme por el futuro. Ahora, me mantengo en el presente, que es donde la vida acontece. Hoy vivo un día a la vez. Y eso se llama… plenitud.

Cuando me amé de verdad, comprendí que mi mente puede atormentarme y decepcionarme. Pero cuando yo la coloco al servicio de mi corazón, es una valiosa aliada. Y esto es… saber vivir!

No debemos tener miedo de cuestionarnos… Hasta los planetas chocan y del caos nacen las estrellas.

Charles Chaplin


http://www.youtube.com/watch?v=Wv49RFo1ckQ&feature=player_embedded